Hacer una canción no es lo más difícil del mundo, pero crear climas y que a su vez esos climas tengan múltiples consecuencias es lo más complicado de realizar para quien se calza un instrumento y comienza a zapar para luego conformar una pequeña obra que termine llegando a los oídos de los demás.
La técnica a la hora de ejecutar la guitarra, el bajo o la batería es esencial, claro está, pero si durante todo un despliegue de destreza se transmite poco y nada, lo que sigue es buscar por otro lado y prestarle atención a esa posible puerta donde haya luz y den ganas de entrar.
Sabido es que en esta ciudad casi se ha extinguido totalmente lo que se conoció como Buenos Aires Hardcore, y ahora, si se le puede llamar de alguna manera, parece que estamos asistiendo a la época del Buenos Aires Stoner, debido a un género que ha tomado por asalto el under porteño y no ha parado de diseminarse por salas de ensayo y pequeños y medianos locales.
En ese contexto es difícil encontrar la originalidad que te diferencia del montón. Y en esa búsqueda se encuentra Stilte, banda integrada por Manuel Sanguinetti, Manuel Platino, Matías Ridolfi y Pablo Fasce. Este grupo stoner entrega cuatro largos y buenos temas en La derrota muere con ellos (grabado por Patricio Claypole en El Attic y editado por Zann’s Music Free Independent Record Label), disco en el que se puede apreciar la variante que han elegido para intentar sacar la cabeza entre la multitud. Se nota la influencia, consciente o no, de Ararat, el proyecto de Sergio Chotsourian, pero sin la faceta “folclórica” que remite a los orígenes armenios del ex cantante y guitarrista de los Natas.
Vale la pena poner play en El invierno va a ser terrible y llegar a Capital del dolor sin saltearse Weimar y Caja negra. La idea, como debería ser siempre, es tomarse el tiempo para hacer una valoración de la obra completa, debido a que el shuffle se ha convertido en el principal enemigo de las bandas nuevas. Mientras transcurre ese tiempo de escucha, también se podrá notar que el arte del disco es digno de una banda que se toma las cosas muy en serio.
Alejandro Panfil
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